Jacqueline A. Hurtado Torres.
Psicóloga
Las heridas emocionales de la infancia pueden tener una huella muy profunda que nos dificultan nuestras relaciones interpersonales y nos impiden enfrentar los problemas de forma adecuada.
Los signos de estas heridas psicológicas se evidencian en: ansiedad, dificultades para establecer relaciones afectivas, pensamientos obsesivos, vulnerabilidad a algunos trastornos, problemas de sueño, actitud defensiva o agresiva, inseguridad, miedo, desconfianza, etc.
Tod@s tenemos un pasado y aunque éste ya no exista, las experiencias vividas en la infancia marcan nuestro carácter y dejan una huella en nuestra vida.
Muchas veces estas heridas obedecen a un pasado infantil traumático. Otras veces se deben a distorsión en la interpretación de la realidad por parte del niñ@. Pueden surgir por una o varias experiencias negativas vividas en la niñez. Algunos ejemplos son: fallecimiento de un familiar, depresión de un@ de los padres, crianza inadecuada, malos tratos, nacimiento de un@ herman@ y los celos asociados a ello.
Estos 5 tipos de experiencias dolorosas o experiencias emocionales de la infancia describiremos las que más afectan el desarrollo y dejan huella en la personalidad.
Texto para descargar 5 heridas emocionales
